Santo
Domingo.- Al igual que en República Dominicana, el aborto en Chile estaba
prohibido sin ningún tipo de excepción, pero la aprobación en el 2017 de la ley
21.030 sobre las tres causales ha salvado la vida de miles de mujeres,
afirmó el doctor Gonzalo García Pino, Ex ministro (magistrado) del
Tribunal Constitucional de Chile durante una entrevista ofrecida al
matutino El Despertador.
Las tres
causales en Chile son: riesgo para la vida de la mujer, inviabilidad
fetal y violación. Sostiene que desde la aplicación de esta ley sobre
las tres causales, se registraron 5 mil 370 casos en cinco años, de los
cuales 802 casos iniciaron el proceso pero no llegaron a interrumpir el
embarazo y 1,614 casos de aborto por riesgo vital de la madre “para mí
esto es una sorpresa porque muchos médicos sostenían que eran poquitos
casos en los que la vida de la mujer se ve en riesgo, y a mí no me parecen
pocos casos francamente, cada caso es un mundo”.
Agrega que “otra hipótesis era que la causal
violación iba a ser la vía de escape, una fórmula por la que iban a
ingresar casos que no deberían ingresar”, sostuvo, sin embargo, resultó
ser la de menor preponderancia cuantitativamente, con solo el 23.6% de
los casos. Mientras que la causal de inviabilidad fetal representa el 46.3%, con
respecto a esta causal la ley ordena tener al menos dos informes médicos para
tener certeza de que se trata de un embarazo inviable.
El catedrático y reconocido abogado, detalló que
en el año 2014 la presidenta Michelle Bachelet presentó un proyecto ley
sobre las tres causales y que el mismo, tras ser aprobado en el 2017,
había sido objetado de inconstitucional por una minoría del Congreso
chileno, siendo declarado finalmente como constitucional por dicho Tribunal.
Dijo que la ley contempla también un protocolo
complementario sobre la prestación médica por aborto y la reformulación
del Código Sanitario de Chile, para que las mujeres que se vea en
necesidad de abortar en los casos señalados sean atendidas en el sistema
público de salud y que en el marco de su difícil situación tengan además un
acompañamiento psicológico.
“No se trata de cuestiones sencillas (…) estos
procesos son extraordinariamente complejos, de hecho el aborto es la
conversación íntima del cuerpo, con la conversación íntima de la
conciencia”. Sostuvo.
El también ex Subsecretario de Defensa de Chile
entiende que, más allá de los alcances religiosos y morales de esta
discusión, propia de sociedades pluralistas, las mujeres tienen derechos
y que se trata de una decisión personal y cualquier otra posición carece
de relevancia al momento de tomar una decisión jurídica sobre cualquier
problema.
García Pino es profesor de Teoría Política y
Constitucional de la Universidad Alberto Hurtado y ha publicado diversos
libros entre los que destacan el “Diccionario Constitucional Chileno”
(2016) y el estudio “Los principios de igualdad y no discriminación, una
perspectiva de derecho comparado. Chile” (2023), Segunda edición,
Servicio de Estudios del Parlamento Europeo, Unidad Biblioteca de Derecho
Comparado, Bruselas, Bélgica. También es especialista en derechos humanos, los
derechos fundamentales, la justicia constitucional y la defensa nacional.